Por Hernan Feijoo
El 26 de febrero de 1986 será recordado por lejos como
uno de los más importantes días en la historia del automovilismo zonal costero.
En el Triangulo del Tuyu, cerca de 50.000 almas presenciaron la 1ra vuelta de
Santa Teresita, evento celebrado en el Semipermanente del Triangulo del Tuyu,
de 9.150 metros de extensión. Con un circuito que salía de lo habitual que
visitaba aquel Turismo Carretera de la década de los 80. Constaba de tres
rectas con sectores sinuosos, que no superaban los 3 km de extensión. De curvas
muy cerradas, la última de ingreso a la recta principal, emplazado sobre la
Ruta Interbalnearia 11, era una curva ciega.
Más de cincuenta máquinas se habían apersonaron para
dar cita al arranque del torneo 1986, aunque el año para el TC se inició mucho
antes. El torneo 1985 finalizó un 5 de enero de este año, cuando Emilio
Satriano con su Chevrolet festejaban el día de Reyes ganando en el
Semipermanente de Tandil.
Roberto Mouras llegaba tras una temporada extraordinaria en busca de su cuarta corona seguida. Tras un fallido retorno a Chevrolet, se anotó 8 victorias y llegaba como el máximo favorito a retener el “1”. Mientras que la armada de Dodge contaba con grandes nombres como Oscar Castellano o Johnny de Benedictis. Tampoco se podía olvidar a Oscar Angeletti, a quien el año le deparaba buenas expectativas dentro de la marca.
Roberto Mouras llegaba tras una temporada extraordinaria en busca de su cuarta corona seguida. Tras un fallido retorno a Chevrolet, se anotó 8 victorias y llegaba como el máximo favorito a retener el “1”. Mientras que la armada de Dodge contaba con grandes nombres como Oscar Castellano o Johnny de Benedictis. Tampoco se podía olvidar a Oscar Angeletti, a quien el año le deparaba buenas expectativas dentro de la marca.
Chevrolet contaba con el mencionado Satriano como su
principal defensor, Vicente Pernía, quien reapareció con otra unidad del Chivo,
y el sanpedrino Osvaldo Morresi, que de a poco se metía en el corazón de los
hinchas del moño.
Ford a su vez tenía a Jorge Oyhanart y Eduardo Marcos,
referentes del ovalo frente al andar de las imbatibles Dodge. Los locales en
tanto ponían su mirada en Pedro Doumic, que tendría sin duda uno de sus mejores
años, siendo la esperanza de los santateresitenses.
Pero las historias también se desarrollaban en los
alrededores del circuito, con personajes y lugareños que vivían también a su
modo y con emoción aquella gesta de costeros y lavallenses de contar con un
evento en la categoría más popular.
“Habíamos ido con la barra de
Fisherton, todos hinchas de Ford, uno de nuestros amigos Marquitos y nos instalamos desde la noche anterior, con
dos pick up, Ford por supuesto. Después de las series se venía la carrera,
había un mundo de gente, y Carlitos era bajito así que pusimos una escalera que
trajimos, que sin darnos cuenta la pusimos sobre un hormiguero. Pobre,
estábamos justo sobre la recta del fondo, y se largó la carrera, una emoción
todos ahí y Marquitos estaba exaltado, agitaba la bandera de Ford, pero no por
la emoción de los autos del TC, sino por las hormigas coloradas que había
subido por la escalera a picarlo” El fanatismo no detiene en su relato a nuestro
querido amigo Charly Garcia, fotografo profesional, que si bien se crió en
Rosario, acostumbraba a viajar a San Clemente del Tuyú cada verano, que hoy es
su actual lugar de residencia, pero recuerda como si fuera ayer aquel día
inolvidable, más allá de este curioso incidente.
“Ese febrero de 1986 habíamos
ido de vacaciones a San Clemente y al saber de la competencia planificamos ir
la noche anterior total no iba haber nadie, nos fuimos con unas carpas en las
chatas y bueno linternas, comida, todo para pasar la noche. Cuando amaneció
había gente por todos lados, los amigos habían llevado un par de damajuanas y
Marquitos antes del incidente se había hecho el fueguito para un asado. Todos
ahí hinchamos por el Vasco Oyhanart, pero bueno había quedado tercero en la
final, superado por De Benedictis y Satriano, pero nada nos quita la alegría de
ese dia, y del olor a asado, de la camaradería, de los lindos momentos”.
En la final la cuestión se resolvía en el mano a mano
que reflejaban el Chevrolet de Satriano y la Dodge de Castellano, amplios
favoritos tras ganar las series, pero nadie
imaginaba a De Benedictis, penando con una manguera del carburador tras
quedar quinto en la segunda serie.
Emilio Satriano y Oscar Castellano se fueron
alternando la punta hasta la séptima vuelta en lo que el piloto de Necochea era
quien tenía más difícil la tarea ya que largaba en la 6º fila, lograba pasar al
frente por apenas una centésima.
Su implacable andar y el predominio que le permitía dominar los relojes, sacando casi dos segundos de ventaja en los parciales de ruta, fueron decisivos para empezar a estampar su nombre en la historia como el primer ganador de la Vuelta de Santa Teresita. Otra Dodge, la del dolorense Miguel Atauri llegaba a tener chances de triunfo, pero una pasada en la segunda curva condenaba sus chances. Tanto él como Doumic se llevaban el calor y el cariño de los lugareños, que en buen número, además de los turistas por la época estival llegaban al lugar. Como una constante del año anterior, Satriano lograba meterse como escolta con el chivo, mientras que Oyhanart, como nos contaba nuestro amigo Charly, iniciaba el año ocupando el último escalón del podio con su Ford. El campeón Mouras, de discreto andar, culmina 10mo, pero se adjudicaba el récord de vuelta, con un promedio superior a los 180km/h, una cifra nada despreciable. Menos fortuna tenía Castellano, quien un trompo y la rotura de la trompa con uno de los neumáticos demarcatorios de la curva, lo dejaban fuera de la pelea por la victoria.
Su implacable andar y el predominio que le permitía dominar los relojes, sacando casi dos segundos de ventaja en los parciales de ruta, fueron decisivos para empezar a estampar su nombre en la historia como el primer ganador de la Vuelta de Santa Teresita. Otra Dodge, la del dolorense Miguel Atauri llegaba a tener chances de triunfo, pero una pasada en la segunda curva condenaba sus chances. Tanto él como Doumic se llevaban el calor y el cariño de los lugareños, que en buen número, además de los turistas por la época estival llegaban al lugar. Como una constante del año anterior, Satriano lograba meterse como escolta con el chivo, mientras que Oyhanart, como nos contaba nuestro amigo Charly, iniciaba el año ocupando el último escalón del podio con su Ford. El campeón Mouras, de discreto andar, culmina 10mo, pero se adjudicaba el récord de vuelta, con un promedio superior a los 180km/h, una cifra nada despreciable. Menos fortuna tenía Castellano, quien un trompo y la rotura de la trompa con uno de los neumáticos demarcatorios de la curva, lo dejaban fuera de la pelea por la victoria.
Está fue la primera de tantas ediciones de un clásico
que con más de una década sobreviviría a una era donde el TC progresivamente se
refugiaba en los autódromos, hasta 1997, cuando tras las muertes de Mouras en
Lobos y Morresi en La Plata, en 1992 y 1994 respectivamente, la máxima dejaba
para siempre las rutas y con ello, un pedazo de la historia que aún persiste en
Santa Teresita.
Primera Vuelta de
Santa Teresita - Carrera Final
Pos
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
NC
NC
NC
NC
NC
NC
NC
NC
NC
NL
NL
|
Nº
4
2
9
11
19
16
17
18
12
1
63
23
41
22
3
88
33
38
62
108
46
111
72
5
68
21
104
34
125
105
94
151
8
57
67
7
66
95
|
Piloto
De Benedictis, Juan Antonio
Satriano, Emilio Salvador
Oyhanart, Jorge
Aventín, Antonio
Doumic, Pedro Roberto
Saiz, Carlos Esteban
Calamante, Mariano A. (h)
Atauri, Miguel Angel
Brescia, Gustavo
Mouras, Roberto José
Arana, Alberto
Nesprías, Juan Carlos
Nani, Carlos
Fiorda, Héctor
Castellano, Oscar
Apella, Néstor
Caparrós, Edgardo
Torrens, Carlos
Deambrosi, Juan Carlos
Gardinalli, Néstor
Becco, Angel Roberto
Fernández, Antonio
Pesenti, Hugo
Morresi, Osvaldo
Piccinini, Hugo
Ducret, René
Segad, Mario
Carelli, Manuel
Jazma, Juan Carlos
Zanardi, Roberto
Delconte, Luis
Pernía, Vicente Alberto
Angeletti, Oscar
Occhionero, Juan Alberto
López, Juan Carlos
Marcos, Eduardo Antonio
Urquiza, León
Landa, Juan Manuel
|
Marca
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Coupe Chevy/Super 250
Ford Falcon/SP 221
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Ford Falcon/SP 221
Coupe Chevy/Super 250
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Ford Falcon/SP 221
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Coupe Chevy/Super 250
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Ford Falcon/SP 221
Dodge Coupe GTX/Slant Six
IKA Coupe Torino/Tornado
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Ford Falcon/SP 221
Ford Falcon/SP 221
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Coupe Chevy/Super 250
Ford Falcon/SP 221
Ford Falcon/SP 221
Coupe Chevy/Super 250
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Ford Falcon/SP 221
Coupe Chevy/Super 250
Coupe Chevy/Super 250
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Coupe Chevy/Super 250
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Ford Falcon/SP 221
Dodge Coupe GTX/Slant Six
Dodge Coupe GTX/Slant Six
|
Vueltas
18
18
18
18
18
18
18
18
18
18
18
18
18
18
18
18
17
17
17
17
16
16
16
15
15
14
14
|
Tiempo
55m32s48
55m42s49
55m56s06
56m15s96
56m35s37
56m35s96
56m46s71
56m55s33
57m01s17
57m02s18
57m13s02
57m14s75
57m33s09
57m48s40
1h01m28s89
1h03m38s30
54m18s89
54m13s54
55m21s69
55m42s55
54m21s96
55m21s01
47m04s77
48m45s85
55m31s96
44m10s30
55m25s31
|
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