DECLARARON DE INTERÉS CULTURAL EL LIBRO “RAÚL ALFONSÍN, EL HOMBRE QUE HIZO FALTA” DE EDUARDO ZANINI

Por Nicolás Karpenco

Marea Editorial celebró ayer la declaración de Interés para la Comunicación Social y la Cultura del libro Raúl Alfonsín, el hombre que hizo falta, de Eduardo Zanini, en la Legislatura porteña. El evento se realizó en el salón Raúl Alfonsín de la casa de leyes de la Ciudad de Buenos Aires, situada en Perú 160. Para la ocasión, el autor estuvo acompañado por la escritora y periodista Analía Argento, el legislador Sergio Abrevaya- promotor de la iniciativa- y la editora Constanza Brunet. Como frutilla del postre, el equipo de Crónica dialogó unas palabras con Zanini, que a pesar de saludar a todo el mundo y estar muy emocionado por la distinción, nos dedicó unos minutos de su tiempo.
Luego de una introducción del legislador Abrevaya, aportando una breve e interesante biografía de Zanini, fue el turno de la escritora y periodista política de Infobae, Analía Argento: "En mis inicios en el periodismo, me encomendaron seguir a la Unión Cívica Radical. Yo iba con mi libretita a las conferencias del partido, era muy joven y en esa inocencia mía empecé a perseguirlo de alguna manera al doctor Raúl Alfonsín, y habiendo sido la figura que fue, "el hombre que hacía falta" como bien dice Eduardo en su libro, siempre me trató como si yo fuera una periodista experimentada. Por lo menos es lo que me hacía sentir a mí, porque lo seguía a todos los actos. Por muchos años para la prensa, así como Perón fue un tirano prófugo en su momento, a Raúl Alfonsín no se lo mencionaba. Eso le daba mucha bronca, y él con ese carácter de gallego cabrón no le daba notas a la prensa. Yo en ese momento tenía 15 kilos menos que ahora, era una bebé y lo seguía y le insistía tratando de hacer la nota, hasta que un día me dijo "bueno venite tal día a tal hora". Cuando llego al departamento de la calle Santa Fe, toqué el timbre y me abrió la puerta el mismo y eso me impactó, no sabía si le iba a poder hacer el reportaje o no. Que un ex presidente de la Nación te trate así, de igual a igual, fue algo increíble para mí. Yo no sabía si él me trataba de esa forma para aflojarme como periodista, para meterme en el bolsillo o si era su manera de ser. En el fondo yo creo que él era así, porque podría habérsela creído y no darme la entrevista, podría haber pedido que el diario mandase un editor o un jefe de redacción y sin embargo yo estaba ahí frente a frente con él. Como era un gran político me dio muy buenos títulos, a diferencia de otros dirigentes que yo grababa un casete entero y no me dejaban ni un título. Y cuando terminamos la entrevista me felicitó, me abrazó y me dijo "que buen reportaje que me
hiciste". Creo que fue un hombre muy humilde, que para bien o para mal marcó muchas cosas para todos los argentinos. Aunque tuvo momentos duros en la vida, es interesante leer en el libro ese momento en que Raúl volvió solo a Chascomús, cuando ya no era más el presidente, donde ya no estaban más los "amigos del campeón". Por eso creo que es interesante repasar la vida del Alfonsín hombre, las cosas que hizo con una mirada tal vez más compasiva después de tantos años, para darle aún más valor a uno de los hombres más importantes en la historia de nuestro país". A continuación Constanza Brunet, editora de la Editorial Marea, dio detalles muy interesantes sobre la obra en cuestión: "Esta declaración de interés creo que es muy merecida. A la hora de elegir libros en la editorial siempre trato de elegir aquellos que tengan un significado especial. Les quiero contar lo que sentí como editora y también como la primera lectora de este libro, que está dentro de una colección que se llama "Historia Urgente". Trabajamos temas de la historia reciente y de la actualidad y justamente se llama urgente porque tiene que ver con la historia que todavía influye en el presente, y en este libro Zanini trabajó con fuentes no solo documentales sino con un montón de entrevistas y además con su propia experiencia, lo que lo hace muy vivo al libro. Los que lo hayan leído lo sabrán y los que no verán que es muy atrapante, tiene esa cosa muy viva de los testimonios. Hemos trabajado mucho en este libro y es muy lindo cuando el personaje en este caso nos genera afecto y simpatía, como lo hace Alfonsín. Terminamos haciendo cronologías, todo un trabajo extra que realmente lo valía, porque queríamos que este libro quede en la historia. Yo por mi generación era muy chica cuando volvió la democracia, por ende conocí la democracia gracias a Alfonsín y a través del libro pude conocer los años anteriores del ex presidente y eso me gustó mucho. Si bien sabía su compromiso y su lucha contra la dictadura y por los derechos humanos, leer ese compromiso por el pueblo me hizo admirarlo mucho más y me hizo entender en profundidad el país que somos hoy, la sociedad argentina, que aún hoy tiene un compromiso muy fuerte por los derechos humanos. Otra cuestión que yo no sabía era la lucha que él tuvo para romper con el peronismo y el anti-peronismo, muy centrado en nuestra sociedad". Luego, la editora leyó dos fragmentos del libro, ante la atenta oída de los presentes. Finalmente fue el turno del periodista y escritor Eduardo Zanini, que visiblemente emocionado agradeció a todos, en especial al legislador Sergio Abrevaya, y luego se expresó haciendo referencia a su obra: "Yo le decía a Sergio -a quien conozco desde hace más de 30 años- a Analía hace 20 y a Constanza hace solo 2, que les quiero agradecer a cada uno de ustedes. Todos hablaron de mí pero en realidad el centro de esta biografía
es el doctor Raúl Alfonsín. Cuando empecé a escribir, me di cuenta de que había personajes que no eran secundarios, que Alfonsín construyó proyectos políticos con mucha gente. Como decía Sergio, yo trabajé en la agencia Télam, que está pasando por una situación muy complicada debido a una gestión desastrosa en materia de comunicación por parte del gobierno, con 145 despedidos. Aquella agencia Télam del 84' estaba conformada en un 90% por hombres y muy pocas mujeres; entre ellas estaba la señora Graciela Petcoff que esta acá presente. Ella fue mi primera jefa y como tarea distintiva me daba todo el cabotaje de la política: "andate a Tucumán, anda a cubrir el congreso del peronismo en Lanús" y yo pensaba que algo bueno en algún momento me tenía que pasar. Me acordaba de eso cuando acompañé a Alfonsín en el avión presidencial en 1987. Pero Graciela fue la persona que me dio trabajo muy generosamente, siendo jefa de política de esa gran agencia que era dirigida por un viejo periodista y amigo personal de Alfonsín, que está mencionado en el libro: Mario "El Loco" Monteverde, que era un personaje del periodismo. El conoció al ex presidente en los años 60 y juntos hicieron una película que se llamó "Inédito". Pero estamos aquí en un salón que desde hace 6 años lleva el nombre de Raúl Alfonsín y si ustedes miran bien las fotos que hay colgadas en las paredes, todas conmemoran un momento histórico en la vida del doctor. Y que además son momentos históricos para el país. En la primera se ve cuando Ernesto Sábato le entregaba el informe final de la CONADEP (NdR: Comisión Nacional sobre la desaparición de personas), un día como hoy pero de 1985, el 23 de septiembre, del que hoy se cumplen ya 34 años. Eso sirvió de base probatoria para el juicio a las juntas militares y ese informe de Sábato terminó siendo en definitiva el libro "Nunca más". Así como muchas veces recordamos de memoria los equipos de fútbol que obtienen un campeonato importante, creo que todos deberíamos recordar sin titubear a esos seis jueces que el 9 de diciembre de 1985 se sentaron ante los militares y dictaron su sentencia con un fiscal que era una "bestia" desde todo punto de vista, Julio César Strassera. Esos nombres deberíamos grabarlos a fuego porque, como decía Sergio, Alfonsín terminó con los golpes de estado, pero después de ese juicio se consolidó aún más la democracia y ningún militar hijo de puta -que creyeron que iban a gobernar para siempre- pensó que un día una justicia democrática con un presidente constitucional los iba a sentar en un banquillo para juzgarlos, con muy pocos antecedentes en el mundo. La foto siguiente muestra como Alfonsín rompió con la grieta entre peronistas y antiperonistas y en esa imagen aparece en el balcón de la casa rosada, en semana santa del 87', con Antonio Cafiero al lado y ante una plaza llena; mientras algunos carapintadas decían que no era un golpe e intentaban romper el orden constitucional, por el simple hecho de que no se querían presentar ante la justicia. La foto de al lado es una fotografía preciosa: es
Alfonsín yendo al poder, del Congreso de la Nación hacia la Casa Rosada, en aquel Cadillac negro descapotable. La cuarta es la ida de Alfonsín del poder, en La Tablada, rodeado de militares, en enero del 89. Y la última representa el símbolo de lo que fue el principio del gobierno de Alfonsín, en lo que fue la primera vez que un presidente constitucional recibía a las agrupaciones de derechos humanos, en este caso a las Madres de Plaza de Mayo. Simplemente quería recordar estos acontecimientos importantes en su vida, que es gran parte de lo que pueden encontrar en el libro. Luego de la conferencia, el equipo de Crónica dialogó brevemente con Eduardo Zanini y estas fueron sus respuestas: -Eduardo, el nombre de tu libro es "El hombre que hacía falta", ¿Vos crees que hoy en día hace falta un hombre como Alfonsín en la política? Contestarte eso es hipotético, pero te aseguro que si, haría falta un hombre como él en la actualidad, de eso no tengo dudas. ¿Que te produce a vos un reconocimiento de este tipo? Me produce mucha emoción, nunca pensé que cuando empecé a estudiar periodismo allá en la década del 80', iba a llegar a estar acá en la Legislatura para vivir un reconocimiento tan lindo como este. Vos viviste gran parte de la época de Alfonsín. ¿Como hizo para reponerse de la "Hiperinflación"? Lamentablemente nunca se repuso. El venía de un proceso de restauración de la dictadura que en un principio pudo manejar, pero después se le fue de las manos y se disparó la hiperinflación, creo que su única materia pendiente fue esa. En la actualidad, ¿Ves algo del partido radical reflejado en Alfonsín? Ya que hay tantas divisiones dentro del partido... No, ni siquiera en su hijo (risas).

Comentarios