En julio de 2019 empezó a circular la noticia de que dos de cada diez adoptados,en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, eran devueltos al Estado por parte de sus nuevas familias. Si se considera el rango de 8 a 16 años, la estadística asciende a uno de cada dos. Esta situación preocupa, indigna, alerta y, también, pasa desapercibida por la mayoría de la población.
Por Alejandro Ferrer
1 ¿Se pueden devolver niñxs?
El Juez de
Menores Dr. Jorge Oscar Fernández inicia el diálogo advirtiendo: “El objetivo es encontrar una familia para el
chico y no al revés”. Sus años de experiencia le indican que, en general, se
piensa que el sujeto de adopción son los padres, quienes inician el trámite.
Pero, en realidad, las necesidades a satisfacer son las del niñx.
Desde la
Dirección de Adopciones del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de La
Nación, la psicóloga Daniela Muro agrega que se busca un proyecto de vida apto, esta es la clave del éxito del
proceso. Primero es el niñx quién adopta a los padres.
La Dra.
Paula Reyes, de la misma repartición, destaca la creación del Registro Único de
Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos (RUA) con la ley 25.854 de 2003. Es el
único medio legal para realizar una adopción y es nacional.
En
definitiva, estas herramientas se utilizan como último recurso para asegurar la
protección infantil, pero puede fallar.
1.1 ¿Qué es la adopción?
La mayoría
de lxs niñxs crecen con su familia de origen y se tratan de resolver todas las
necesidades dentro de ese marco. Sin embargo, hay casos donde esto no es
posible y, por el interés superior, se recurre a una solución permanente en
otro núcleo familiar.
Pueden ser
adoptados todos los menores de 18 años declarados por un juez en situación de
“adoptabilidad”. Para llegar a ese punto se evalúa si corre peligro la
integridad, si fue abandonadx o fallecieron sus padres y se desconoce toda
filiación; si su familia manifestó el deseo de no hacerse cargo del cuidado o
crianza, o si se comprueba que no puede hacerlo.
Daniela
Muro explica: “Se pretende que la institucionalización sea transitoria, en
hogar o familia temporal. A partir de los diez años se busca una aceptación ‘no
literal’ del joven para ser adoptable.”
“En algunos
distritos se utiliza el Periodo de Vinculación, que son reuniones, fines de
semana o salidas de lxs niñxs con sus posibles adoptantes, bajo el seguimiento
profesional. Es un primer paso para que se conozcan. Es una práctica no
reglamentada, pero extendida”. Completa.
Luego
inicia el Periodo de Guarda, la convivencia en el hogar definitivo, que debería
durar hasta seis meses. En la práctica se extiende mucho más. Stella y Eduardo
(ver nota “Los tiempos de Uma”) esperaron casi doce años para conocer a su
hija, y están en guarda desde el mes de agosto de 2016.
Para
obtener la adopción definitiva se debe lograr un fallo favorable en un Juicio
de Adopción. Esto no siempre es automático, se requiere de asesoría legal para
los padres. Puede iniciarse por la convocatoria de un juez, de un órgano
administrativo o por el postulante.
El Juez
Fernández define con claridad, “una vez que se dio la adopción, pasa a ser como
los de sangre. No existen diferencias entre hijos.Si surgen problemas, tendrán
que ir a psicóloga, a un médico o con quien sea apropiado para resolverlo,porque
la situación es de la familia”.
Y agrega:
“En todos estos pasos pueden surgir desviaciones y demoras si existen
apelaciones a la ‘adoptabilidad’ del niño”.
Para los
adolescentes existe otra forma, el Referente Afectivo, que en la Provincia de
Buenos Aires se utiliza como una guía y compañía en esa etapa de la vida, sin
que sea un vínculo filial.
1.2 ¿Amor o Padres?
Retomando
la definición inicial, el éxito está dado por el amor y la contención que tenga
el niñx. En nuestra sociedad, esa figura la cumplen los padres. Si quiere
profundizar más, puede buscar a los clásicos como Durkheim, McLennan o Lévi-Strauss,
pero a mí me gusta reflexionar con un texto –escrito “en sencillo” y olvidado-
de Engels, “El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado”. El concepto
de Familia está atravesado por el auge de la nueva “oleada feminista” en el
mundo.
Este
incremento de las “devoluciones” se observa desde 2016 -solo se producen en el
período de guarda-.Los profesionales argumentan diferentes causas, en general,
deducidas de los casos concretos.
·
La
pareja estaba en crisis, buscó un paliativo a través de tener hijxs, y no se
mantuvo para el momento en que existió la posibilidad de adoptar.
·
Tuvieron
un hijx biológico en el lapso de espera y cambiaron de idea sobre adoptar.
·
Se
decepcionaron de su/s hijx/s adoptivxs.
·
No
pudieron enfrentar los problemas de convivir.
·
No
supieron construir el vínculo familiar.
El Dr.
Daniel Vázquez,
especialista en niñez, recuerda un caso donde “una pareja de profesionales, con
altos ingresos, adoptaron tres hermanas: una en edad adolescente y las otras
dos, infantes. La madre discutió con una de las menores, porque se portó mal, y
la golpeó,entonces la mayor salió en defensa, amenazando a la mujer por si lo
volvía a hacer. El vínculo se rompió (o nunca se construyó) y en menos de tres
meses devolvieron a las chicas”.
La
licenciada Muro destaca que el avance de la Educación Sexual Integral ayuda a
des-estigmatizar la adopción, a mejorar el reconocimiento de lxs niñxs como
sujetos y ayuda a comprender que el vínculo de los nuevos padres es con chicos
que traen sus propias historias. Lo que disminuiría las probabilidades de
situaciones de quiebre.
Una segunda
institucionalización es casi una sentencia de madurez en el hogar, cuesta mucho
que el niñx vuelva a intentar vincularse con otra familia.
Muro
recomienda que, si ya está escolarizadx, aprendió a manejarse en un ámbito que
conviene mantener. Es decir, si fue a escuela pública, no corresponde
insertarle en una privada de elite tras la adopción. Hay que respetar lo que le
gusta y cómo se relaciona con más comodidad.
En ese
sentido es importante que en la escuela se informe de su adopción, no ocultarlo
sino reconocerlo y asimilarlo. A veces se requieren atenciones especiales.Por
lo general se intenta una integración sin matices con los demás niñxs de su
curso.
“No hay
amor a primera vista”, remarca la psicóloga. Ser padres involucra tantas cosas
que es un proceso sensible y de construcción cotidiana. Nadie nace sabiendo
cómo hacerlo, ni como ser hijo. Todo lo que les cuesta a los padres naturales,
les cuesta a los adoptivos. Y, a veces, más.
Agustina,
una joven de 28 años que está cursando sus estudios de periodismo en el
Instituto Crónica, es un ejemplo de cómo se construye una familia exitosa
basada en el afecto y la transparencia. Incluso tiene hoy un novio con el que
comparte esta experiencia de vida (ver nota “Lo tengo re-asumido”).
1.3 Derechos y niñxs
Entre 2017
y 2019 hubo 61 niñxs devueltos en CABA, sobre un total de 300 —según los informes del Ministerio Público Tutelar (MPT) de la ciudad —.Este
ascenso no puede explicarse por las situaciones expuestas, debido a que no
varían con el calendario. Por ello, en las entrevistas abordamos el tema
económico, ya que es un índice que sí se modificó en los últimos años.
Cuando se
comienza a detectar el fenómeno ya había ocurrido el pico inflacionario de
2015. Los salarios formales (es decir quienes trabajan en blanco) retrocedieron
casi un 20% desde el inicio de la gestión de este gobierno.
Estos datos se reflejan también en jóvenes que se cuestionan el proyecto de
formar familia, postergando la maternidad.
Los índices
de edad promedio del primer hijx reflejan al perfil de los adoptantes, familias
con edades superiores a 30 años, con “un ingreso suficiente para poder afrontar
los gastos generados por la crianza” y “con un lugar adecuado acorde a las
necesidades de la niña, niño y adolescente”.
A nivel
internacional, también se observa que una crisis como la de 2008 provocó un
descenso en adopciones.
No solo es
una auto-restricción. Si bien, no se especifica cuál es el mínimo poder
adquisitivo para ser candidato a adoptar –esto depende de las condiciones que
impone cada distrito y la evaluación de los profesionales-, en el caso de
Stella y Eduardo hubo un rechazo inicial por no contar con ese requisito.
Las
estadísticas del RUArefuerzan la hipótesis: una caída pronunciada del
porcentaje de adopciones respecto de las guardas en el período analizado.
Guardas y Adopciones
informadas al 06/11/2019
Totales a Nivel País
|
|||
Año
|
Adopciones
|
Guardas Preadoptivas
|
%
|
2005
|
14
|
18
|
77,77
|
2006
|
25
|
46
|
54,34
|
2007
|
17
|
36
|
47,22
|
2008
|
120
|
132
|
90,90
|
2009
|
93
|
135
|
68,88
|
2010
|
75
|
197
|
38,07
|
2011
|
78
|
186
|
41,93
|
2012
|
84
|
241
|
34,85
|
2013
|
109
|
252
|
43,25
|
2014
|
173
|
299
|
57,85
|
2015
|
141
|
326
|
43,25
|
2016
|
106
|
298
|
35,57
|
2017
|
181
|
378
|
47,88
|
2018
|
170
|
445
|
38,20
|
2019
|
91
|
479
|
18,99
|
Total
|
1477
|
3468
|
42,58
|
Si bien,
ninguno de los entrevistados ubica al carácter económico como el principal
factor, por lo expuesto, podemos inducir una relación directa entre esos
problemas y la condición de adoptantes, ya sea evaluada por el Estado o
auto-percibida por las familias.
Puede,
además, generar malestar y estrés en la pareja, que desemboque en una crisis (de
tal magnitud) que lleve a tomar decisiones trágicas, como la recisión del
periodo de guarda y, para el niñx, un segundo abandono. Un hecho lamentable y
hasta repudiable. Pero, desde esta investigación, voy a evitar generalizar la
valoración moral. –Por favor, lea el artículo “Hecha la ley, hecha la trampa”
para comprender a lo que me refiero-.
En
consecuencia, no se puede escindir los derechos de los niñxs de las condiciones
económicas (materiales) a las que se los expone y su traslado a otros aspectos
(cultural, ambiental, psicológico).
2
Salir
del modelo de propiedad de lxs niñxs
En las
entrevistas con los profesionales consulté sobre la cuestión de fondo, tras las
leyes que regulan los derechos y responsabilidades sobre la niñez, “¿Es el niñx
propiedad de los padres?”. Aun reconociendo avances legislativos, todos
aceptaron que perdura este concepto.
Si bien, en
el caso de adopción se delimita mucho mejor el rol del Estado y el de las
familias (biológica y adoptiva), lo que busca el sistema es más que un
“responsable” para su cuidado. Ya que, en este compartir responsabilidades el
niñx sufre la falta de presupuesto y denigración del sistema de contención
social, como también las falencias económicas y sociales de sus familias.
2.1 “Famulus quiere decir esclavo
doméstico”
Estamos
desandando un camino ya recorrido. En el siglo XIX (el ya mencionado) Engels
describe la relación familiar moderna en estos términos:
“El hombre
empuñó también las riendas en la casa; la mujer se vio degradada, convertida en
la servidora, en la esclava de la lujuria del hombre, en un simple instrumento
de reproducción. Esta baja condición de la mujer, que se manifiesta sobre todo
entre los griegos de los tiempos heroicos, y más aún en los de los tiempos
clásicos, ha sido gradualmente retocada, disimulada y, en ciertos sitios, hasta
revestida de formas más suaves, pero no, ni mucho menos, abolida.
(..) Famulus
quiere decir esclavo doméstico, y familia es el conjunto de los esclavos
pertenecientes a un mismo hombre. En tiempos de Gayo la ‘familia, id es
patrimonium’ (es decir, herencia), se transmitía aun por testamento. Esta
expresión la inventaron los romanos para designar un nuevo organismo social,
cuyo jefe tenía bajo su poder a la mujer, a los hijos y a cierto número de
esclavos, con la patria potestad romana y el derecho de vida y muerte sobre
todos ellos. ‘La palabra no es, pues, más antigua que el férreo sistema de
familia de las tribus latinas, que nació al introducirse la agricultura y la
esclavitud legal y después de la escisión entre los itálicos arios y los
griegos’. Y añade Marx: ‘La familia moderna contiene en germen, no sólo la
esclavitud (servitus), sino también la servidumbre, y desde el comienzo mismo
guarda relación con las cargas en la agricultura. Encierra, in miniature, todos
los antagonismos que se desarrollan más adelante en la sociedad y en su Estado’”.
A
principios del siglo XX, Alejandra Kollontai precisaba los roles de la familia
en la era industrial:
“Bajo el
régimen capitalista la instrucción del niño ha cesado de ser una obligación de
los padres. El niño aprende en la escuela. En cuanto el niño entra en la edad
escolar, los padres respiran más libremente. Cuando llega este momento, el
desarrollo intelectual del hijo deja de ser un asunto de su incumbencia.
Sin
embargo, con ello no terminaban todas las obligaciones de la familia con
respecto al niño. Todavía subsistía la obligación de alimentar al niño, de
calzarle, vestirle, convertirlo en trabajador diestro y honesto para que, con
el tiempo, pudiera bastarse a sí propio y ayudar a sus padres cuando éstos
llegaran a viejos.
Pero lo más
corriente era, sin embargo, que la familia no pudiera casi nunca cumplir
enteramente estas obligaciones con respecto a sus hijos. El reducido salario de
que depende la familia trabajadora no le permite ni tan siquiera dar a sus
hijos lo suficiente para comer, mientras que el excesivo trabajo que pesa sobre
los padres les impide dedicar a la educación de la joven generación toda la
atención a que obliga este deber. Se daba por sentado que la familia se ocupaba
de la crianza de los hijos. ¿Pero lo hacía en realidad? (..)
Bajo el
sistema capitalista, los hijos eran con demasiada frecuencia, en la familia
proletaria, una carga pesada e insostenible.”
En el siglo
XXI los movimientos feministas de todo el mundo siguen reclamando contra estas
instituciones y prácticas. En Argentina tomaron forma a través de la “Campaña
Nacional por el Derecho al Aborto Legal”, el “Ni Una Menos” y otras
organizaciones.
A propósito
de este tema -la ubicación de los hijos en la familia-, hay un desfasaje
pronunciado entre lo que aspiran los padres adoptantes y la realidad de los
niñxs que necesitan familias. Los primeros tienden a buscar repetir el proceso
biológico y los últimos ya son sujetos, con sus problemas –muchas veces no
están solos, sino con sus hermanos-, que necesitan otro tipo de acompañamiento:
Estadísticas al 06/11/2019 10:10 hs - fuente Base de
datos DNRUA - % Calculado sobre un
total de 3916 legajos
|
||
Cantidad de solicitantes por legajo
|
Casos
|
%
|
Legajos con 1 solo Solicitante
|
886
|
22,63
|
Legajos con 2 Solicitantes (matrimonios,
uniones convivenciales, parejas, matrimonios igualitarios)
|
3030
|
77,37
|
Total de legajos
|
3916
|
100
|
Disponibilidad adoptiva según la edad
del niñx
|
Casos
|
%
|
1 año
|
3475
|
88,74
|
2 años
|
3529
|
90,12
|
3 años
|
3386
|
86,47
|
4 años
|
2951
|
75,36
|
5 años
|
2452
|
62,61
|
6 años
|
1664
|
42,49
|
7 años
|
1038
|
26,51
|
8 años
|
698
|
17,82
|
9 años
|
336
|
8,58
|
10 años
|
239
|
6,1
|
11 años
|
64
|
1,63
|
12 años
|
37
|
0,94
|
13 años
|
13
|
0,33
|
14 años
|
7
|
0,18
|
15 años
|
5
|
0,13
|
16 años o más
|
3
|
0,08
|
Nota: Los cortes de edad no son
excluyentes, P. E., quien acepta 8 años, también puede aceptar aceptar
4 y 1
|
||
Disponibilidad Adoptiva según la
cantidad de niñxs que aceptan
|
Casos
|
%
|
Aceptan 1 solo niñx
|
1805
|
46,09
|
Aceptan 2 o más ninñxs
|
2111
|
53,91
|
Total de legajos
|
3916
|
100
|
Distribución según la cantidad de Niñxs
que aceptan
|
Casos
|
%
|
Aceptan hasta 2 niñxs
|
1954
|
49,9
|
Aceptan hasta 3 niñxs
|
153
|
3,91
|
Aceptan hasta 4 o + niñxs
|
4
|
0,1
|
Total de legajos
|
2111
|
53,91
|
Disponibilidad Adoptiva según si aceptan
Discapacidades o Enfermedades
|
Casos
|
%
|
No aceptan Discapacidades o Enfermedades
|
3256
|
83,15
|
Si
aceptan Discapacidades o Enfermedades
|
660
|
16,85
|
Total de legajos
|
3916
|
100
|
El Dr.
Vázquez aporta una experiencia sobre cómo se resuelve, hoy, esta situación:
“Cuando estaba como defensor de niños en la comuna 4 (Boca-Barracas) mi equipo,
éramos tres personas, podía tener hasta 40 Medidas Excepcionales;son actos
administrativos para forzar una situación de adoptabilidad contra la voluntad
de padres, madres e incluso de niñxs, para cambiarles el centro de vida.”
“Cada
medida puede implicar a cuatro chicos y un seguimiento de 90 días. Pero la
Dirección de Mujer no tiene presupuesto o está sobrepasada de trabajo,entonces
el 80% de las acciones que se toman quedan vaciadas por falta de recursos. Lo
que significa que los pequeños de 9 años o más van a quedar confinados a un
hogar, a una vida de escapes y retornos a instituciones, hasta que alcancen la
mayoría de edad. A los hermanos menores les resta esperar a ser adoptados en
forma individual, separados”.
En otro
aspecto, existe la corriente #ConMisHijosNoTeMetas que rechaza la Ley Nacional
de Educación Sexual Integral (ESI) aduciendo que son los padres quienes definen
qué educación
obtendrán
los niñxs. Contrariando las alentadoras experiencias que surgieron en los
establecimientos donde se realiza la ESI y se descubrieron casos de abuso hacia
los menores o sus madres. Además de favorecer la integración social y la
superación de los prejuicios discriminadores.
La
Educación Pública en una crisis crónica genera grandes diferencias respecto a
quienes acceden a la privada, con mejores condiciones estructurales. Y
diferencia entre las mismas escuelas estatales, según el presupuesto de cada
distrito.
1.1 Responsabilidad de todos
Si hubiese
una responsabilidad superior del Estado –presupuesto y políticas públicas- para
asegurar la niñez se resolverían muchos de los problemas vigentes. Le dejo una
propuesta de otra receta:
·
Con
educación estatal nacional única, de calidad, se terminan las diferencias en la
formación.
·
Con
presupuesto y profesionales para cumplir las leyes de adopción, contra la
violencia hacia las mujeres y de los derechos del niñx, la crianza no sería una
carga.
·
Si
no es propiedad de nadie, es responsabilidad de todxs.
Esté de
acuerdo (o no) con estas escasas líneas, sepa que al finalizar el artículo
seguirán los niñxs buscando familia y todos los problemas enumerados (y muchos
más) permanecerán vigentes. Eso es algo objetivo, ocurre. Lo que resta saber,
es qué hará usted con esta información al levantar la vista.
2
Artículos
complementarios
2.1 Los tiempos de Uma
Stella y
Eduardo iniciaron los trámites de adopción doce años atrás. En esa época todo
estaba en carpetas de papel, hoy existe el Registro Único de Aspirantes. Lentos
y angustiantes pasos los llevaron a ser la familia de Uma.
Stella -Primero
te hacen hacer unos estudios médicos y trámites. Esto te lleva más de un año.
Hasta que podés tramitar la carpeta.
Una vez que
te aceptan la carpeta, vas a un curso que dura un mes. Donde hablan de los Derechos
del niño, de que hay que adoptar chicos grandes. Luego, entrás en la lista de
espera. Y para permanecer, todos los años debés renovar la solicitud, la
carpeta.
Todos los
años se realiza el test psicológico, el del asistente social y otros. En nuestro
caso, la primera vez, no nos aceptaron por bajos recursos. Porque vivíamos en
una casita alquilada. Constituida con un poco de madera, un poco de cemento y
un poco de chapa.
Con el
tiempo pude empezar a trabajar de maestra, enganché más suplencias, entonces
nos mudamos. Nos pedían que alquilemos una casa con la misma cantidad de
habitaciones que chicos a adoptar.
Además,
contar con los ingresos, el total, para sostener la solicitud. En ese momento
nos inscribimos para hasta tres hermanos y, por lo cual, tuvimos tres
habitaciones vacías. Y los espacios debían estar habilitados para chicos. Lo
conseguimos por una mano que nos dieron unos amigos. Que nos alquilaron la
casa.
Repetimos
todos los años el procedimiento. Sufris mucho, porque la espera es muy larga,
todo muy tedioso. El último año dije que ya no quería seguir. No quería saber
más nada y justo nos llamaron por Uma.
Periodista -¿Cómo fueron las
evaluaciones? ¿Qué pensás que estaban evaluando?
S -En
realidad nunca sabés qué evalúan. Porque sentíamos todo el tiempo la hipocresía
de los evaluadores. Los psicólogos te preguntaban sobre tu núcleo familiar, tus
vínculos sociales. Y los asistentes sociales hacían incapie en los espacios,
cuando los chicos están hacinados en un hogar. Sentís mucha impotencia, todo el
tiempo.
Y si vos
confrontás alguna opinión de ellos, te hacen ir más veces. Te doy un caso: en
un momento de la charla grupal, nos decían “ustedes saben que es la única
manera de adoptar” y mi marido harto de la situación, le dijo “sabés que no es
la única forma, no seamos hipócritas” (de echo a nosotros nos habían ofrecido y
dijimos que no, porque había mucha gente como nosotros esperando). Para ellos
fue terrible, se armó un escándalo. Ellos tienen mucho egocentrismo
profesional.
Vos pensás en
¿cómo sería el bienstar de los chicos? Se mide en habitaciones o en amor,
educación, alimentos.
Nosotros
logramos comprar la casa antes de que viniera Uma. Cuando la compramos tuvimos
que hacer todo el tramiterío denuevo. Otra vez la carpeta. Esta casa es
inmensa, tiene 5 dormitorios, cinco. Estaba recién pintada, con todo reciclado
a nuevo. Y la asistente social no quiso aprobar el ambiental porque le faltaba
una baranda a la escalera.
Te sentís
ultrajado todo el tiempo. A este momento solo tenemos la guarda de la nena, no
la adopción.
Todo el
tiempo tenés que entregar el recibo de sueldo. Ahora, mi marido se quedó sin
trabajo, esto hace todo más difícil.
P -¿Cuándo
se la entregaron?
S -El 25 de
agosto de 2016.
P -Pensé
que la guarda era de 6 meses a un año
S -No se
cumple la ley. Es más, la ley dice que cuando un chico obtiene la
“adoptabilidad” no pueden pasar los tres meses. Para lograrlo, su carpeta tiene
que recorrer todo el país. Mi hija entró a los 6 meses, salió a los 4 años y
medio.
Desde la
Ley a cómo funciona hay un abismo.
Fijate que
mi nena, sabe la verdad de todo, pero te voy a contar algo que no quiero
recordarle.
Gracias al hermano que insistió, los pudieron juntar a todos en un
hogar, sino los separaban. A los 12 años separan nenes con nenes y nenas con
nenas. Los mantuvieron porque tenían buena conducta. A los 17 años los sacan de
los hogares.
Cada chico
tiene un tutor. El Estado le da un financiamiento al tutor, pero los chicos al
superar esa situación se van sin un peso. Por eso, muchos chicos que ves
viviendo en las calles salieron de un hogar.
P -¿Cómo
fue la vida con Uma?
Cómo te
explico… Uma se apropió de sus padres, nos adoptó en el momento. No nos deja
llamara por el nombre. Nosotros tenemos que llamarla “hija”. El resto sí la
pueden llamar “Uma”.
Tenés que
aprender a ser padre, como todos los padres. Cuando Uma llegó fue un momento
muy especial, en ese momento le descubrieron cáncer a un familiar y esos 6
meses que tuve de licencia por ella, me los pasé en un hospital.
Cuando la
conocimos Uma no hablaba, balbuceaba. Estaba baja de peso. Totalmente
descuidada. Mal alimentada. Con los pies todos torcidos para adentro.
Nos
juntaron con la psicóloga y ella, para organizar un fin de semana con ella. La
sentó a upa y le leyó la ley de los derechos del niño y la niña. Imaginate que
con cuatro años y tres meses no entendía nada.
Al llegar a
la casa, repitió todo el tiempo “Mia, mamá, papá”. Cuando tuvimos que
regresarla, el lunes, se escondía por toda la casa para no volver. Y ahora la
ves que se ríe, que corre, es una lechoncita. Y, por eso, nos dieron la guarda.
P -¿Pasaron
varios años y sigue el vìnculo así de fuerte?
Sí, sí.
Somos papás como cualquiera que tiene sus hijos. Vamos aprendiendo. Y ellos son
sobrevivientes, nos dan clases a nosotros. Da sentido a todo lo que te puede
desbordar o pasar en la vida.
Ella sabe
que la mamá y el papá la estuvieron buscando durante muchos años y que quien la
procreó la dejó allí para que nosotros la encontráramos.
A Uma le
costó mucho entender el significado de Hermano, porque en el hogar eran todos
chicos eran hermanos, y los cuidadores eran todos tíos. No entendía el lazo
familiar, biológico. Una vez iba a venir la tía, cuando le avisamos que vendría
se asustó. Pensó que venían a buscarla del orfanato. Pero con el tiempo
entendió lo que es una familia.
2.2 Lo tengo re-asumido
Agustina -Me
adoptaron de recién nacida, en1991, en Pehuajó. Debería haber nacido en Juan
José Paso, pero el hospital era muy precario y me mudaron. Desde el primer
minuto estuvieron mis padres junto con quien me engendró, y listo.
Periodista
-¿Cuándo lo supiste?
-A los 11
años. Cuando ya tuve el suficiente uso de razón como para entenderlo,me
contaron todo. No sé quién es mi padre biológico. Pero la persona que me parió
trabajaba en la calle, tenía muchos hijos más y no quería que su hija naciente
viva en esas condiciones. Por eso tomó la decisión de darla en adopción.
En 2011
conocí Pehuajó y Juan José Paso. Mis papás adoptivos me relataron la historia
ocurrida en cada lugar. Nunca encontré un punto en el que me diera la sensación
de que me están mintiendo y es por eso que me siento cómoda con la familia que
tengo.
Hasta
ahora, con 28 años, nunca sentí la necesidad de seguir indagando más.
P -¿Fue una
adopción legal o simplemente te anotaron al nacer?
-Fue legal,
con juzgado en Lomas. La Jueza llamó cuando se enteró que esta persona estaba
por parir,se conocieron una semana antes. Asistentes sociales fueron a ver la
casa donde me iban a criar, a analizar cómo era el entorno familiar,los
trabajos que tenía cada uno,para ver si realmente me podían cuidar o no.
Inclusive,
me cuenta mi mamá la anécdota de que pasaban el dedo por la cocina para ver el
polvo.
La casa tenía
que estar impoluta.
P -¿Sabés
cómo fue el trámite?¿Cómo decidieron adoptar?
-Elmotivo
fue porque mi mamá no puede tener familia. De muy joven sufría de hemorragias
internas y tuvieron que sacarle el aparato reproductor. Lo intentó, una vez,
pero sufrió un aborto espontáneo. Fue muy duro.No quisieron darse por vencidos
y entraron en la lista de aspirantes para adopción.
P -¿Qué
edad tenía tu mamá cuando se inscribió?
-Treinta y
pico.
P -¿Qué
tipo de trabajos tenían?
-Mi papá
siempre trabajó en fábricas. Es tornero. Mi mamá en esa época estaba trabajando
en una casa mayorista de venta de ropa para chicos.
P -¿Cómo
fue tu niñez?¿Notaste alguna diferencia con otros chicos?
-Fue una
niñez normal, nunca sentí diferencias. Ya en la secundaria me di cuenta que no
era el único “Bichito raro”,en un trabajo práctico se develó que había tres
chicos más.
A mí no me
cuesta decir ni reconocer que soy adoptada, lo tengo super-asumido, pero me di
cuenta que hay muchos a los que les cuesta. Se sienten “bichos raros” por no
ser de la familia “normal” o porque temen al “qué dirán”.
P -¿Tenés
hermanos, hermanas?
-No, hija
única. Eso me costó al principio, en la pre-adolescencia. Porque todos tenían
algún hermano/a para jugar. Y yo, nada, amiguitos de peluche, imaginarios y la
perra. Pero, después me acostumbré. Ahora ya crecí, siendo yo sola, y en una
familia chica. Ya lo tengo asumido.
De hecho
cuando nací, el 8 de octubre –viaje desde Pehuajó a Remedios de Escalada–, la
Jueza llamó porque había nacido también un varón, en otro lugar. Mi familia le
pidió una hora para pensarlo. Dijeron “tenemos a la nena, ¿también al varón? No.
Nos quedamos con la nena”.
¡¿Por qué?!
Podría haber tenido un hermano. Pero bueno, quedó en otra anécdota. Tener dos
recién nacidos era mucho.
P -¿Qué
opinás sobre la adopción?¿Apoyás?
-Apoyo. Si
el día de mañana no puedo tener hijos, adopto. Me gusta, esa parte de mi
historia. Y tener en cuenta lo básico: Si no puedo mantenerme yo, no voy a
poder mantener a un hijo. Tengo que lograr una estabilidad económica para poder
apostar a adoptar o tener un hijo.
P -¿Opinás
que es diferente si quienes adoptan no son una pareja héteronormativa?
-No, para
nada. El amor es igual en todo sentido. No cambia en decir tengo dos mamás, dos
papás o uno solo. He pensado en adoptar individualmente. El amor se le puede
dar a un hijo de cualquier forma.
P -Desde el
gobierno han polemizado con la campaña por el Derecho al Aborto legal con la
Adopción. ¿Cómo lo ves?
-Yo acepto
el aborto en caso de discapacidad o violaciones. Pero, también hay que
considerar la situación que está viviendo esa persona gestante. Es difícil, hay
que estar ahí para decidir.
P -¿Conocés
de chicos que están en el sistema de adopción por mucho tiempo, en hogares?
-No, pero me
crucé con varios chicos adoptados en mi vida. De hecho, tuve vínculos con
ellos. Recientemente conocí a unodonde él y sus hermanos fueron adoptados
ilegalmente y su familia le oculta esa realidad. Esto me produjo indignación,
por la mentira.Tienen el derecho a saber la verdad, de dónde vienen. Lo apoyé
en buscar una respuesta,pero del otro lado estaba todo muy trabado. No se pudo
avanzar mucho.
Averiguó
que su hermana había sido parida en el baño de la casa de su madre adoptiva.
¿Cómo se puede permitir eso? Me dolía y me daba bronca esa situación. Y que se
oculten las historias. La mujer gestante desaparecía luego de parir.
No importa
si vivís en una casa re linda y con todas las comodidades. Tu historia no es tu
historia, es algo inventado. Esas cosas me duelen, me molestan, me dan bronca.
P -Pero tu
historia es con tus padres actuales
-Sí, pero a
mí me dijeron la verdad y yo puedo ir a saber más, al registro de La Plata sin
problemas. En el caso de este chico y sus hermanos, una vez apareció la madre
biológica a hacer unos planteos, la adoptiva le dijo que son sus hijos y la
echó. Son sucesos que pueden ocurrir,por la ilegalidad.
P -¿Por qué
creés que salías con chicos adoptados?¿era buscado?
-No, la
verdad es que se dio así. Ahora estoy con un muchacho que también es adoptado.
No busco con un cartel “Adoptado”. Y en el caso de él también es todo conocido,
legal. Incluso hicieron el proceso para cambiarle el apellido.
P -¿Hay
algo que vos veas de común entre las personas con quienes saliste y son
adoptadas?
-No. No
descubrí algo especial. Me fui enterando con la charla. Nada especial.
P -¿Te
sentís más cómoda con alguien adoptada?
-Sí, claro.
Hay un camino recorrido común. Las personas que nos tuvieron quisieron que
tengamos otra forma vida. Eso te da otra pauta de cómo manejarte en el mundo.
Me han cargado, hecho bullying, me han dicho cosas,en ese sentido me siento más
cómoda.
El amor es
el mismo, pero el padre adoptivo tiene algo distinto. Porque no sólo esperó 9
meses, sino todos los tiempos del juzgado y un montón de cosas que vienen
atrás. Es una espera diferente.
Cuando
llegué a mi casa me habían puesto carteles y organizado una fiesta. Es un lazo
distinto, más fuerte.
P -¿Qué
opinás sobre la devolución de chicos, que es el motivo del trabajo que estoy
haciendo?
-Me resulta
difícil pensarlo. Pero creo que hay que ponerse en el lugar de los padres y
evaluar su situación. Si yo pudiese, adoptaría muchos hijos, pero es difícil.
Es una situación crítica.
Tiene que
haber un seguimiento para controlar y ayudar a cumplir los requisitos,
asignaciones, etc. Que las familias tengan toda la ayuda necesaria para poder
cumplir con ser padres.
P -¿Qué
mejorarías en el sistema de adopción?
-Que se
mejoren los tiempos. No puede ser que haya tantos años esperando, y niños que
llegan a la adultez en hogares. Hay que encontrar la manera de que no haya esos
tiempos. Es muy feo criarse solo y terminar en la calle, pasando hambre y frío.
Una familia
siempre te contiene de esas situaciones.
2.3 Hecha la ley, hecha la trampa
En la
entrevista con el Juez Fernández abordamos un tema difícil.
P -Me
contaron que existen adopciones por fuera del sistema. Acuerdos entre las
familias de la madre biológica y quien pretende adoptar. ¿Puede ser?
-En mi
experiencia,hablando por fuera de lo jurídico, hay madres que quieren entregar
a la criatura y no saber nada más. En los congresos discutíamos si es un acto
de cobardía o de valentía,porque donde comen dos, comen tres. Pero, este hecho
no quita el dolor de la madre que deja a su hijo. El amor de madre no está en discusión,
sino las condiciones económicas para que coma los 365 días del año. Nunca nos
pusimos de acuerdo, en ningún congreso.
A veces la
investigación dentro del grupo familiar va contra los deseos de la madre
biológica. Luego hay que dictar el estado de abandono de la criatura, informándole
que no se puede echar atrás. Además, por detrás de todo esto, hubo casos con
sospechas de intercambio, de que pagan.Luego la mujer llega a su casa y dice
que su hijo murió.
Hubo casos
donde, con el tiempo, los abuelos descubren que en realidad lo entregó y
reclaman como familiares de la criatura.
Desde el
juzgado buscamos asegurar el bienestar a la criatura.
Antes había
un camino por escribano, pero eso ya no va más. Que hacía un trámite mucho más
corto, por fuera del sistema de adopción.
Hay otra
forma de hacerlo también. Cuando una persona, llamada Esther, se interna
diciendo que es “María del Carmen”, el nombre de la mujer adoptante. Dice que extravió
su documento de identidad. Da nombre al chico con el apellido de la nueva
familia. Entonces aún con el registro civil en el lugar (en santa fe logramos
asegurar una oficina en los hospitales) no se resuelven todas las situaciones
de adopción por fuera del sistema. Hecha la ley, hecha la trampa.
En estos
casos, hay plata de por medio. Son situaciones muy complejas, de mucha bajeza.
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