El Instituto Crónica realizó la cobertura en el lugar de los hechos. Los alrededores de la calle Pasteur mostraron un despliegue policial enorme donde los cortes estaban apoyados por efectivos de la Federal y de la Polícia Metropolitana y en algunos sectores estaban miembros del Grupo GEOF, la entrada para prensa era una cuadra más adelante de la que usaban los familiares de las víctimas y sobrevivientes, cuando se ingresaba quedaban tres sectores bien delimitados, de la vereda izquierda se encontraba todos los miembros de la prensa, en la calle y frente al escenario estaba el sector de familiares y sobrevivientes que era el más numeroso, por último en la vereda derecha era la parte destinada a aquellos que tenían algo que ver con la organización o algunas personas de renombre como Jorge Telerman, el intendente de San Isidro Gustavo Posse o la madre del fiscal Alberto Nisman.
El acto se inició con el sonido de la sirena a las 09:53, hora exacta de la explosión, luego se recordaron los nombres de cada una de las 85 víctimas, tuvo la conducción de la periodista de Telefé Noticias Cristina Pérez quien era la encargada de dar la palabra a los oradores y de leer los nombres de aquellas organizaciones/asociaciones que brindaban apoyo, se mostraba muy emocionada al punto de llegar a las lágrimas varias veces.
El primero en tener la palabra fue Ariel Cohen Sabban directivo de la AMIA y presidente de la Federación de Comunidades Judías en Argentina, dio un discurso fuerte y extenso donde habló de todo el contexto que rodea a la causa desde sus comienzos y sobre todo hizo foco en la “Verdad”, la verdad para encontrar y llevar ante la ley a los culpables del atentado y la verdad del caso Nisman, la frase que se llevó todos los aplausos fue “¿Qué pasó y cómo murió el fiscal que investigaba el atentado?”. Además otra vez rechazó el memorándum de entendimiento con Irán y a pesar de que no se cansaba de repetir que no estaba de ningún lado político hubo varias frases dedicadas al gobierno nacional, pidió a los precandidatos presidenciales que digan opinan y que van a hacer para saldar la deuda con el pueblo argentino.
Luego la presentadora del acto recordó a Nisman y fue el momento donde la hija mayor del fiscal muerto el 18 de enero prendió una vela y puso una rosa que sumó a las de las víctimas, Iara Nisman escribió una carta pero que no se animó en público y por ese motivo fue Cristina Pérez quien la leyó, en la carta la joven destacó que “Dicen cosas para ensuciarlo y él no se puede defender”. Luego el cantante Raúl Lavié le puso su voz musical a una poesía llamada “Un sueño Imposible”.
El último de los oradores fue Mario Averbuch, padre de una joven que se encontraba trabajando en el edificio al momento del atentado, otro discurso fuerte y donde una de las frases fue la que se llevó hasta vítores de algunos de los presentes “Los Argentinos no necesitamos que por cadena nacional alguien desempeñe el rol de cronista policial que no le corresponde y nos cuente las hipótesis de cómo murió Nisman” y también criticó el memorándum de entendimiento con Irán.
Entre los presentes se veían familiares con fotos de aquellos que perdieron la vida, sobrevivientes que no podían contener sus lágrimas pero lo que más llamaba la atención eran los jóvenes, en un costado de la valla y todos juntos, varios preadolescentes que lucían en sus cabezas los clásicos kipás miraban respetuosos el acto, sus caras, reflejaban ese respeto y no se atrevían a hablar. La mayoría de ellos nacieron luego del hecho, sus padres o alguien de la comunidad les tuvieron que contar lo que pasó aquella mañana del 18 de julio de 1994 y de cómo aún no se pudo encontrar ni verdad ni justicia.
Iván San Martín
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